Discografía

• Canciones para perdedores - (1976)
• Toda canción será plegaria - (1976) junto a Litto Nebbia

 

Integrantes en el álbum

• Canciones para perdedores - (1976)

 

MIRTHA DEFILPO - Voz

LITTO NEBBIA - Teclados, sintetizador, piano y chorus

JORGE GONZÁLEZ - Contrabajo

NÉSTOR ASTARITA - Batería

 

Músicos invitados:

RODOLFO ALCHOURRON - Guitarra de 12 cuerdas, arreglos y dirección de cuerdas

MANOLO JUÁREZ - Piano eléctrico

OSVALDO VALLS - Batería

DANIEL HOMMER - Guitarra y bajo eléctrico

POCHO LAPOUBLE - Batería

ROQUE NARVAJA - Guitarras

DINO SALUZZI - Bandoneón

 

 

Biografía

Mirtha Defilpo fue una cantautora argentina que no tuvo mucha difusión. Había nacido en Córdoba, en 1944, y murió pocos días antes de cumplir los 67 años, el 11 agosto del 2011.

Trascendió en el medio musical no sólo por ser la esposa de Litto Nebbia sino también por ser la autora de la mayoría de sus letras. Trabajó junto a él en su etapa de mayor creatividad incluyendo toda su poesía su música.

Tal actividad la mantuvo relacionada con el espectáculo hasta que decidió dar cauce a una nueva faceta de su expresividad, quizás la más importante, que es interpretar sus propios temas.

En 1976 editó su único álbum solista “Canciones para perdedores”, una obra maestra que se debe escuchar mientras pinta las paredes de su casa. Comenzaron a grabarlo en el invierno del '76, sobre un material que ella tenía un tiempo atrás, salvo algunas canciones que compuso a último momento. Los músicos participantes fueron Litto (que además ha hecho la mayor parte de la música, salvo dos temas que pertenecen a Alchourrón), Astarita, Lapouble, González, Valls, Homer, Juárez, Saluzzi y Narvaja.

Más allá del plano musical, donde se localiza el trabajo más pulido, la faceta vocal presenta una chatura difícil de eludir en el álbum de una poeta que canta sus escritos.

En cuanto a la tendencia poética que encara Defilpo, se advierte una labor de búsqueda que suele caer en el ejercicio surrealista de encubrir el contenido generalmente cotidiano, lo que impide su acceso a un amplio espectro de público.

Con su nombre y junto al de  Nebbia grabó otro disco, “Toda canción será plegaria”, que se editó en México en vinilo y años más tarde en CD, en nuestro país.

Ellos compartieron la música y la poesí en más de 60 canciones. La mayoría están en los álbumes de casi mediados del ’70: “Melopea”,  “Fuera del cielo”, “El vendedor de promesas”, “Bazar de los milagros”, entre otros.

A comienzos de los años ochentas, la pareja le pone fin a su relación sentimental, tomando distintos rumbos.

En su oculto regreso, se dedicó a su obra poética, de un tono realista, donde figuran los libros “Después de Darwin” (1983),  “Malezas” (1985), los dos de la editorial “Ultimo Reino”, y “Matices” (1991). Algunos de sus poemas, como “Lo inasible” están publicados en 200 años de poesía argentina, la antología que editó Alfaguara con selección y prólogo de Jorge Monteleone.

Muchas veces sus letras fueron criticadas de intelectuales y herméticas. Sólo con el paso del tiempo las personas encontrarán un extraordinario valor en sus  letras y poesía.